El equipo de seguridad nacional del presidente estadounidense, Barack Obama, se reunió este sábado para estudiar posibles medidas luego de que el Parlamento ruso abriera el camino para una acción militar en Ucrania, informó un funcionario de la Casa Blanca.
Antes de la reunión en la Casa Blanca, el secretario estadounidense de Defensa, Chuck Hagel, habló por teléfono con su homólogo ruso, Serguei Shoigu, en un intento de Washington por mantenerse al día con la creciente crisis en Ucrania y la república autónoma prorrusa de Crimea.
Varios encargados de la seguridad nacional, entre ellos el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas estadounidenses, Martin Dempsey, ingresaron a la Casa Blanca para la poco usual reunión de este sábado.
“El equipo de seguridad nacional del presidente se reunió hoy (sábado) para recibir informaciones de última hora de la situación en Ucrania y discutir potenciales opciones”, dijo un funcionario de la Casa Blanca. “Daremos más información esta tarde”, dijo la fuente.
Obama no se encontraba en la reunión, pero recibió un informe de su asesora de seguridad nacional, Susan Rice, y otros funcionarios, según el funcionario.
Funcionarios aclararon que “no hay cambios” sobre la presencia militar estadounidense en la región.
Esta reunión se produjo un día después de que Obama advirtiera de que habría “costos” si Rusia violaba la integridad territorial de Ucrania, luego de la salida del presidente prorruso Viktor Yanukovich.
Este mensaje fue ignorado por el presidente ruso, Vladimir Putin, quien pidió al Parlamento de su país autorización para enviar tropas a Ucrania, una medida que llevó a las autoridades de la ex república soviética a colocar sus tropas en estado de alerta.
