Tras conocerse en el Regimiento de Infantería Nº1 “Buin” hace cinco años, Cristián Ortíz González y Soledad Medina Toloza se enamoraron y decidieron contraer matrimonio por el civil, planificando minuciosamente una ceremonia religiosa para enero de 2014, sin embargo, sus planes tomarían un giro inesperado.

La novia sería diagnosticada y hospitalizada en estado terminal debido a la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, demencia progresiva que daña al cerebro de manera irreversible, luego de presentar una serie malestares y síntomas a contar de noviembre de 2013.

Pero esto no se transformó en un impedimento para que unieran sus vidas en matrimonio. “Decidí no dejar nada inconcluso, vivo cada día con ella como si fuera un año, no se si se dará cuenta, pero trato de hacer todo lo que tengo a mi alcance para no dejar cosas pendientes y no hacerla sentir enferma”, indicó Ortíz.

“Cuando la desahuciaron sentí que no podía enfocarme en mi dolor y decidí cumplir con nuestros planes de casarnos”, agregó, para lo cual tuvo que conseguir una serie de autorizaciones, contrayendo matrimonio el 28 de enero en una habitación del Hospital Militar de Santiago.

Ortíz dijo sentirse afortunado, agradeciendo el apoyo de su familia, del regimiento y del establecimiento de salud. “Para nosotros esto es una meta cumplida, nos completamos y unimos aún más… me siento muy afortunado dentro de mi dolor”, afirmó.