Partidos políticos de la Nueva Mayoría bajaron el perfil a los cuestionamientos a las ministras designadas Claudia Barattini, en Cultura, y Fernanda Villegas en Desarrollo Social, quienes tienen créditos solidarios para educación superior sin pagar. A juicio del Partido Socialista y la Democracia Cristiana esta es una situación que vive un millón de chilenos.

Desde el Partido Socialista, la Democracia Cristiana y el Partido Radical aseguraron que los cuestionamientos a Claudia Barattini, designada como ministra de Cultura y Fernanda Villegas en Desarrollo Social, no tienen mayor relevancia, puesto que es una situación que vive al menos un millón de chilenos.

Para el presidente socialista, Osvaldo Andrade, esta es un tema que vive una gran cantidad de chilenos y aseguró que será el equipo de Michelle Bachelet el que tenga que determinar si alguna de las futuras autoridades debe dar un paso al lado.

Lo que sí aseguró, es que es una misión de los partidos políticos hacer una mejor revisión de antecedentes de quienes ocupen un cargo en el futuro gobierno con el fin de evitar inconvenientes.

Para el diputado y timonel subrogante de la DC, Fuad Chahín, esto no inhabilita a las autoridades nominadas para ocupar un cargo público, puesto que incluso lo ve como un buen signo.

Esto, porque a juicio de Chahín se demuestra el esfuerzo que Barattini y Villegas hicieron para estudiar.

Desde el Partido Radical, el vicepresidente Ricardo Navarrete, indicó que la solución a los problemas que envuelven a Barattini y Villegas se solucionan pagando la deuda que tienen por el crédito solidario por ser, a su juicio, casos simples.