La infanta Cristina, hija menor del rey Juan Carlos, abandonó el sábado por la tarde el tribunal tras defender su inocencia ante el juez que la imputó por delitos fiscales, en el marco de un escándalo que sacudió a la monarquía.

“La justicia funciona. Todos somos iguales ante la ley y la infanta lo ha demostrado”, lanzó su abogado, Miquel Roca, al salir del tribunal de Palma de Mallorca, en las isla Baleares, detrás la infanta, quien partió en el automóvil en que había llegado por la mañana.

Durante siete horas, Cristina, de 48 años, primer miembro de la familia real imputado por la justicia, respondió a las preguntas del juez José Castro, instructor del caso, y de las diferentes partes.

El juez Castro sospecha que Cristina, séptima en la sucesión al trono de España, cooperó en las presuntas actividades ilícitas de su marido, Iñaki Urdangarin, imputado junto a un exsocio de malversar 6,1 millones de euros (8,3 millones de dólares) entre 2004 y 2006 mediante una sociedad sin ánimo de lucro denominada Instituto Nóos.

Una parte de esos fondos habría sido desviada hacia Aizóon, una presunta empresa pantalla propiedad de Cristina y su esposo el 50%. El juez interrogó a la infanta minuciosamente sobre los gastos personales que aparentemente pagó con dinero de dicha empresa.

“Se ha podido esclarecer todo y despertar, creemos, en las administraciones públicas y esperemos también en la opinión pública cuan inocente es la infanta de todas las imputaciones que se le han dirigido”, aseguró su otro abogado, Jesús María Silva.

“La justicia seguirá su camino, resolverá lo que tenga que resolver. Hoy no podía ser para la infanta y para sus abogados un día mejor”, afirmó Roca.

Tras la comparecencia de este sábado, el juez Castro debería cerrar rápidamente la instrucción y decidir si se abre juicio y contra quiénes.

Según los abogados de la acusación popular, Cristina se desvinculó ante el juez de las presuntas actividades fraudulentas de su esposo.

“No sé, no contesto, no me consta, de eso se ocupaba mi marido”, respondió mayoritariamente la infanta según Manuel Delgado, abogado de la asociación de izquierdas Frente Cívico ‘Somos Mayoría’, una de las acusaciones populares.