La devolución de dineros a los candidatos presidenciales por parte del Servicio Electoral sigue provocando coletazos, a días de las elecciones que determinaron una segunda vuelta a desarrollarse el próximo domingo 15 de diciembre.

Según establece la ley cada candidato recibe $687 por cada voto recibido durante los comicios, monto que deberá ser utilizado para cancelar la propaganda y que se entrega luego que el Servel haya aprobado un balance de gastos que de manera obligatoria deben presentar los postulantes.

En ese sentido, los gastos electorales se realizan en base al cálculo de posibles votos que se recibirán. Por lo anterior, la baja participación registrada el pasado domingo incidirá negativamente en el monto que cada candidato recibirá, lo que en algunos casos dejará en un mal pie a los postulantes que en su mayoría recurrieron a créditos bancarios para enfrentar la carrera a La Moneda.

Según publica La Tercera, la mayoría de los postulantes pidió préstamos a Banco Estado, como en el caso de Michelle Bachelet, que logró 3.070.012 sufragios (con el 99,93% de mesas escrutadas) por lo cual debería obtener poco más de dos mil millones de pesos ($2.106.028.232). No obstante, esa cifra no alcanza para cubrir el crédito bancario de poco más de dos mil quinientos millones de pesos ($ 2.506.000.000) de BancoEstado.

Aunque desde el comando de la abanderada de la Nueva Mayoría se ha señalado que hay presupuesto para cubrir la diferencia de trecientos millones de pesos ($397.000.000), gracias al aporte que realizó el Partido Socialista tras un crédito que pidieron al Banco BCI de poco más de mil millones de pesos ($1.150.000.000).

El resto de los candidatos, en tanto, también quedarán en números rojos tras la devolución del Servel. Entre ellos se cuenta a Ricardo Israel y Tomás Jocelyn-Holt, quienes recibirán 26 millones de pesos ($26.043.990) y ocho millones de pesos ($8.801.380), respectivamente. En el caso del postulante del PRI, su deuda con BancoEstado es de ciento cincuenta millones de pesos ($150.000.000), por lo cual queda con un saldo negativo de ciento veinticuatro millones, monto que su partido no alcanza a cubrir con la devolución del Servel al conglomerado de trece millones de pesos.

En el caso del ex diputado DC, su préstamo con la entidad bancaria asciende a cincuenta millones de pesos ($50.000.000), quedando con una deuda de $42.000.000, según La Tercera.

Por su parte Franco Parisi, su deuda alcanza los cuarenta y un millones de pesos ($41.000.000), debido a que recibirá del Servel cuatrocientos millones y medio ($456.474.004) que servirán para cancelar gran parte de los cuatrocientos noventa millones que pidió a Banco Estado ($498.000.000).

Marco Enríquez-Ominami y Alfredo Sfeir, por su parte, no tendrían inconvenientes para asumir sus compromisos bancarios. ME-O pidió cincuenta millones de pesos a BancoEstado y docientos cincuenta millones a otra entidad financiera, cifra que es superada por los casi quinientos millones que recibirá del Servel ($495.477.220).

Sfeir, por su parte, recibirá ciento seis millones de pesos ($106.050.798), mientras que el préstamo que solicitó alcanza los ochenta millones de pesos, quedando con un saldo de veintiséis millones de pesos.

Marcel Claude recibirá por parte del Servicio Electoral poco más de ciento veinte millones de pesos ($126.845.516), que le alcanza para cubrir el crédito de ciento diez millones de pesos. Sin embargo, a través de su cuenta en Twitter, reveló que le faltan 150 millones para cubrir todas las deudas que le generó su carrera a La Moneda.

En el caso de la otra postulante que competirá en segunda vuelta, la oficialista Evelyn Matthei, su desembolso bordeará los mil cien millones de pesos ($1.128.655.906), cifra de la cual se desconoce si alcanzará para cancelar el crédito que pidió en el Banco Chile, debido a que no reveló detalles del préstamo.

Cabe destacar que la ex candidata del Partido Igualdad, Roxana Miranda, y que recibirá cincuenta y siete millones de pesos ($57.409.282) del Servel, no pidió crédito bancario.