Un nuevo caso de insatisfacción con el hospital Dr. Guillermo Grant Benavente de Concepción se registró esta semana, resaltando la idea de colapso que ronda a este y otros recintos médicos de la provincia. Una de las principales críticas es la falta de especialistas y de medicina.

A fines de agosto, Lizardo Guajardo, ex minero de 82 años, cayó de su cama sin poder hablar o moverse. En esa condición lo encontró su esposa Ana Fernández, quien aún espera en los pasillos del hospital regional, por más de cinco días, un diagnóstico respecto a su marido.

Guajardo fue tratado inicialmente en la comuna de Coronel, pero la falta de médicos e implementos en el hospital San José lo obligaron a ser trasladado a Concepción. Para su compañera, Ana Fernández, en Coronel simplemente “no hay medicina”.

Sin recetas no hay medicamentos, lo que tiene a Lizardo como un sobreviviente al propio sistema de salud. Sin embargo, el costo de su mantención es cada vez más difícil de sostener.

Este caso, que se suma a la serie de reclamos, revive la pregunta del por qué del colapso de uno de los hospitales más grandes de Chile.