Un brote de influenza en el norte del país mantiene en alerta a las autoridades de salud. En Tarapacá se han registrado ocho muertes confirmadas y 300 contagiados.

Preocupación causa un brote de influenza que se registra en la Región de Tarapacá, que ha provocado la muerte de 10 personas, ocho de ellos confirmados por el Instituto de Salud Pública (ISP), dos por confirmar y alrededor de 300 contagiados.

El miércoles, el presidente Sebastián Piñera anunció que la región adelantará las vacaciones de invierno en una semana, desde el 1 al 19 de julio, para evitar los contagios en los escolares.

Además, se ampliará los grupos objetivos para la vacunación, adultos mayores desde 60 años y los niños hasta los cuatro años, más gente en situación de calle y grupos de baile religioso, para lo cual las autoridades locales ya cuentan con 10 mil dosis adicionales.

Según el seremi de salud de Tarapacá, Manuel Fernández, la situación es preocupante. Se mantiene una alerta sanitaria y dependiendo de como evolucione la situación, se evaluará la suspensión de la fiesta de la Tirana del próximo 16 de julio.

De los ocho fallecidos, siete corresponden a la variante H1N1, y el restante corresponde a la cepa H3N2. Según la autoridad local, todos tenían algún tipo de enfermedad crónica asociada y residencia en Iquique y Alto Hospicio.

Según el ministro de Salud subrogante, Jorge Díaz, la situación que vive Tarapacá se debe principalmente a la migración que se da en la región de personas provenientes de Brasil, Perú y Uruguay y los provenientes del lado Pacífico, donde también se han registrado brotes de influenza.

El ministro (s) Díaz sostuvo que el haber adelantado la campaña de vacunación contra la influenza en diez días, provocará el adelanto del máximo de contagios, lo que debiera suceder la próxima semana, y posterior a eso comenzar a bajar la curva.