La popular chef de cocina estadounidense Paula Deen, involucrada en un escándalo por comentarios racistas, apareció el miércoles en televisión por primera vez tras ser demandada por un exempleado, y afirmó estar “destrozada” por la polémica.

Sin embargo, Dean, considerada la reina de la cocina sureña, pasó también a la ofensiva y declaró que las denuncias en su contra son producto de la envidia por su éxito.

En una entrevista exclusiva con el programa “Today” de NBC, una llorosa Deen admitió haber usado un insulto de índole racial, pero pidió que aquellos que nunca hubieran hecho algo así “tiraran la primera piedra”.

Sin embargo, agregó: “Yo soy lo que soy y no voy a cambiar. Y hay alguien malvado por ahí que vio lo que yo había logrado (con mi trabajo) y lo quería”.

Deen de 66 años, es un ícono en Estados Unidos. Pero la demanda por discriminación de un exempleado afroestadounidense ha apagado su estrella: tras reconocer haber pronunciado un insulto racista, dejó de estar en la cadena Food Network, y fue abandonada por uno de sus patrocinadores, Smithfield Foods.

Además de aparecer en varios programas de la TV estadounidense, la chef, que aseguró que nunca quiso herir a nadie, ha publicado más de una docena de libros de cocina. Tiene dos restaurantes en Savannah, Georgia (sureste), y su propia línea de productos derivados.