La Organización de Naciones Unidas (ONU) anunció la suspensión momentánea de sus operaciones de distribución de ayuda alimentaria en Gaza, después de un ataque de manifestantes en cólera a una de sus oficinas.

El jueves, decenas de personas irrumpieron en una instalación de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA) para reclamar el restablecimiento de una partida mensual en efectivo a las familias pobres, que había sido suspendida el lunes a raíz de recortes presupuestarios de la entidad.

Miembros de los equipos de seguridad de la ONU lograron evacuar la oficina invadida, informó la organización.

“Comprendemos perfectamente las consecuencias que pudo haber tenido la suspensión de la ayuda para algunos beneficiarios”, indicó la ONU en un comunicado. Sin embargo, la nota también señaló que “las manifestaciones de la semana pasada ya habían forzado a la UNRWA a cerrar varios de sus centros”.

“La situación se agravó con las acciones (del jueves). Todos los centros de ayuda y de distribución serán, por consiguiente, cerrados hasta que los grupos involucrados ofrezcan las garantías necesarias para que las operaciones de la UNRWA se desarrollen sin problemas”, afirma.

La entidad añadió que “nos encontramos en una situación verdaderamente lamentable, en la medida en que la distribución de alimentos afecta actualmente a unos 25.000 refugiados cada día. Pero no podemos tolerar las amenazas constantes a nuestros empleados”.