La Clínica Dávila negó una actuación negligente respecto al aborto espontaneo por parte de una mujer en el baño de ese recinto. La afectada denunció que se negaron a atenderla y su padre estudia acciones legales, mientras que el Ministerio de Salud respaldó el actuar de la clínica.

Mediante un comunicado publico, la Clínica Dávila negó haber dejado sin atención a Marcia Castro de 33 años, quien dio a luz en el baño de ese centro de salud privado a un feto ya fallecido.

La madre denuncia que el jueves pasado se le informó que el bebé no era viable, pero el medico a cargo no le realizó la cesárea correspondiente solo porque debía viajar al extranjero, y este lunes, cuando debía ser intervenida, no se le habrían brindado las atenciones adecuadas.

De acuerdo a las explicaciones de la clínica, en los casos en que el feto está muerto no conviene inducir el parto y lo más recomendable es esperar el aborto natural. Según el comunicado del recinto, la mujer recibió ayuda inmediatamente después del aborto.

Esta versión fue totalmente respaldada por el ministro de Salud, Jaime Mañalich.

Pese a estos argumentos, la familia de Marcia Castro estudia interponer acciones legales contra la Clínica Dávila.