Setenta personas han esperado por más de 16 horas el zarpe de una barcaza de la Naviera Paredes que sufrió un desperfecto cuando una de sus hélices se enredó con un cabo suelto que flotaba en el mar.

La travesía que tenía punto de partida en Río Negro y de llegada en Estepo la noche de este miércoles a las 22 horas, aún no comienza. Lo anterior dejó a 35 vehículos aislados en Hornopirén sin poder cursar el viaje.

Cerca de las 2 de la mañana, otra embarcación recaló en Hornopirén para solucionar el problema a 20 vehículos, sin embargo, los ocupantes de los otros 15 automóviles debieron amanecer en el lugar, según lo señaló uno de los pasajeros afectados.

A pesar de que el hombre declaró en conversaciones con La Radio que fueron los ocupantes de 15 vehículos los que durmieron en éstos, la empresa difirió esta información acotando que sí se brindó alojamiento a pasajeros de ocho automóviles.

Rodrigo Pacheco, gerente de Naviera Puelche y vocero de la Naviera Paredes, acotó que el desperfecto se produjo al momento del embarque, ya que la nave recaló en perfectas condiciones en Río Negro, por lo que no se contempló el alojamiento y la comida de los pasajeros mientras esperaban el arriba de la próxima embarcación.

La empresa, agregó que se está evaluando una compensación económica a los pasajeros, quienes aún se encuentran esperando una embarcación que los lleve rumbo a Estepo.

El vocero de la Naviera Austral, se comprometió a habilitar una barcaza cerca de las dos de la tarde de este jueves, para así concretar de una vez por todas el viaje que tiene a aproximadamente setentas pasajeros recalados en Río Negro.