Los científicos no han descubierto todavía las gafas que permiten desnudar a la gente pero este miércoles anunciaron una técnica láser con la que se puede ver a través de algunos materiales, algo que interesa sobremanera a los médicos y a los espías.

Esta técnica, todavía incipiente según sus inventores, utiliza un láser y un ordenador potente. Ya permitió a un equipo de investigadores de Holanda y de Italia “ver” un objeto oculto detrás de una barrera no transparente de vidrio triturado.

El mismo procedimiento permitiría ver lo que ocurre detrás de una hoja de papel o de una capa fina de pintura, asegura a la AFP Allard Mosk, del Instituto de Nanotecnologías de la Universidad holandesa de Twente.

Una vez mejorada, “en veinte años creo que dispondremos de un aparato del tamaño de un teléfono móvil que colocaremos en un material, y apretando un botón, podremos ver lo que hay detrás”, estima el físico.

Algunas sustancias, como el papel, la piel o el vidrio esmerilado parecen completamente opacas cuando en realidad dejan filtrar un poco de luz, pero una luz difusa y distorsionada que impide al ojo humano ver a través de ella.

El método presentado el miércoles en la revista británica Nature emplea un láser que bombardea el material, en este caso un vidrio de cristal triturado que impide pasar la luz en línea directa y la dispersa en diferentes direcciones.

La luz que logra atravesar el vidrio choca contra el objeto oculto detrás de él, que la devuelve a la pared interna del cristal.

Esta luz es tan tenue y nebulosa que el ojo humano no puede interpretarla. Por el contrario pueder ser captada por un programa informático que la decodifica y reproduce una imagen del objeto oculto, explica Allard Mosk.

“No se ve el objeto propiamente dicho, ni siquiera se ve su forma, pero gracias a nuestro método de detección todo lo que necesitamos es conocer la cantidad de luz”, precisó.

Descodificar esta luz “es como un puzzle enorme, y afortunadamente es el tipo de puzzle para el que están muy dotados los ordenadores”.

Según el investigador, esta tecnología podría ser muy útil en la imaginología médica no invasiva y en el ámbito de las nanotecnologías, porque permitiría ver en el interior de un chip informático.

“Teóricamente, se podría leer una carta dentro de un sobre, lo que no estaría mal para los espías”, destaca Allard Mosk.

Pero esta técnica no podría aplicarse a los materiales negros o a los que absorben la luz, reconoce.

Tampoco permitirá crear gafas para ver a la gente desnuda, avisa el físico.

“No permitirá ver a través de algo con discreción. Uno se daría cuenta muy rápido si alguien le apunta con un láser muy potente”, ironiza.