Contrario a la normalidad que informó el ministro Guillermo Silva, de la Corte Suprema, tras completar la visita anual a los tribunales de la zona hace una semana, el trabajo de la Corte de Apelaciones de Concepción está en problemas a raíz de la falta de abogados integrantes.
Fuentes judiciales indicaron que durante este año ha sido complejo lograr el funcionamiento de las seis salas del tribunal de alzada penquista, debido a que tres de los nueve abogados integrantes designados en marzo rechazaron el nombramiento, a lo que se sumó el repentino fallecimiento de Jorge Caro en agosto pasado. Así, la Corte de Apelaciones tiene hoy la colaboración de sólo cinco abogados integrantes.
Se cuestionó que la Corte Suprema enviara hace seis meses al Ministerio de Justicia las ternas para reemplazar a los abogados integrantes que no juraron, sin que hasta ahora el Ejecutivo haya completado el trámite de nombramiento.
En Concepción el seremi de Justicia, Roberto Coloma, respondió a las críticas y explicó la situación.
Sin la dotación completa de esos juristas y con la ausencia frecuente de ministros que deben acudir a cursos en la Academia Judicial, se hace cada vez más complicado para la secretaría del máximo tribunal penquista conformar la salas de la Corte.
A esta situación se suma un informe del Consejo Técnico de la Corporación Administrativa del Poder Judicial, que detectó una falta de jueces y por ende una recarga laboral en los juzgados de Garantía y Laboral de Concepción, así como el Tribunal Oral en lo Penal de Concepción, los que -se dijo- trabajan al límite.
