El Tribunal Oral en lo Penal de San Felipe condenó a 12 años y 6 meses de cárcel a Nicolás González, quien asesinó a su polola Tamara Lepe, cuando se encontraba con 8 meses de embarazo.
Con la lectura de sentencia culminó el proceso judicial en contra de González, quien en noviembre del año 2011 asesinó a golpes a su pareja, quien se encontraba con un embarazo de 29 semanas de gestación.
En un principio, la Fiscalía y la abogada del Sernam habían solicitado cadena perpetua por homicidio calificado agravado y aborto violento; sin embargo, el caso finalmente fue calificado como homicidio simple y aborto violento, por lo que la pena máxima podía ser de hasta 15 años, y finalmente fue de 12 años y 6 meses.
Frente a esta situación, el fiscal Osvaldo Basso manifestó que se debe analizar el fallo, leerlo y ver todas las razones por las cuales se llegó a esta pena.
Por su parte, la directora del Servicio Nacional de la Mujer, María de los Ángeles de la Paz, señaló que la pena nunca es suficiente para este tipo de delitos tan complicados.
Además, la autoridad mencionó que si bien este no era un femicidio propiamente tal, de acuerdo a lo establecido en la ley, Sernam igual se hizo parte en el proceso, ya que se trató de un caso de violencia de género extremo que fue de alta connotación.
