De acuerdo a un artículo de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), es importante observar nuestras uñas, ya que ciertos cambios en ellas pueden ser una señal de que padecemos una enfermedad.

“Ciertas enfermedades del corazón causan cambios en la forma o el color de las uñas, también algunas enfermedades reumáticas se pueden diagnosticar por cambios en la circulación capilar de las uñas y ciertas infecciones graves también presentan hallazgos que típicamente se ven como hemorragias en astillas”, explicó Luis Ostrosky-Zeichner, profesor de medicina y epidemiología en la University of Texas Health Science Center at Houston y director de epidemiología del Memorial Hermann Healthcare System, en declaraciones recogidas por Yahoo!.

Por ello, si tus uñas cuentan con alguna de las características que te mostraremos a continuación, visita a un especialista.

1. Línea en la parte superior: La llamada “línea de Beau” puede dar cuenta de un déficit de vitaminas, fiebre e incluso reacciones adversas de algún fármaco.

2. Cuando se separa demasiado del dedo: Si tu uñas tienen la parte blanca muy grande, por lo que se separa demasiado del dedo, puede ser una señal de hiper o hipotiroidismo. También puede indicar una reacción adversa a medicamentos.

3. Rayas verticales: Cuando estas líneas son irregulares puede ser una señal de artritis, enfermedades cardiovasculares o algún desorden genético como la enfermedad de Darier.

4. Curvadas hacia adentro: Cuando tus uñas parecen garras por ser muy curvas, puede haber un indicio de enfermedades cardiopulmonares o incluso carcinomas.

5. Decoloradas: Si tus uñas son prácticamente transparentes, a tal punto que se ven rojizas, puede ser una señal de cirrosis o enfermedades cardiovasculares. En tanto, si la decoloración afecta a sólo la mitad de la uña, puede estar indicando un problema renal.

6. Amarillentas: Las uñas amarillas pueden ser producto de la acción de los colorantes de los esmaltes, pero también puede ser un indicio de problemas bronquiales.