Estados Unidos desea una asistencia total en la Cumbre de las Américas, pero cada país debe decidir si participa, señaló este miércoles un portavoz del Departamento de Estado ante el anuncio del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, de que no irá a Cartagena.

“Quisiéramos ver una participación generalizada de los países del continente”, toda vez que la Cumbre es “una oportunidad para que los líderes debatan sobre los temas que atañen a los ciudadanos”, dijo en rueda de prensa el portavoz Mark Toner.

Pero “en última instancia, cada país toma su propia decisión”, señaló Toner.

El presidente Correa anunció el lunes que no iría a la Cumbre de las Américas que se realizará el 14 y 15 de abril en el balnerario colombiano de Cartagena, ni a ninguna otra de esas citas continentales, mientras se mantenga la exclusión de Cuba.

Bogotá se abstuvo de extender una invitación a la isla comunista aduciendo que no había consenso al respecto entre los países de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Estados Unidos se había opuesto a la posibilidad de la asistencia de Cuba, toda vez que este país no desea reincorporarse a la OEA, lo que le obligaría a suscribir la Carta Democrática Interamericana.

La OEA levantó en 2009 la suspensión de Cuba que había estado vigente desde 1962 y dejó de parte de La Habana iniciar las gestiones para su retorno.