Una niña penquista de cuatro años padece una extraña enfermedad genética -de la cual existen sólo 60 casos en el mundo- llamada “síndrome de maullido de gato”, por lo que recibirá una pensión de gracia hasta que cumpla la mayoría de edad.

La pequeña Angie no camina, habla ni come a sus cuatro años. Sólo gatea y se afirma de las cosas para alcanzar los objetos que desea. Ella es la tercera de cuatro hermanos y necesita con urgencia viajar a Estados Unidos para recibir un tratamiento que prolongue y mejore sus condiciones de vida.

Viviana San Martín, su madre, teme que la enfermedad siga evolucionando coartando aún más la vida de su pequeña, pues existe la posibilidad de que desarrolle leucemia y problemas al corazón, entre otras afecciones.

El nombre del Síndrome proviene del llanto de quienes sufren de esta enfermedad, el que recuerda al maullido de un gato.

Con el fin de ayudar a paliar los gastos que provoca, el gobernador Alejandro Reyes, entregó una pensión de gracia de 545 mil pesos mensuales a los padres.

Finalmente, cabe mencionar que según las estimaciones de la Asociación española de afectados por este síndrome, 1 de cada 40 mil personas lo padecen, por lo que se habla de que en el mundo hay cerca de 60 casos, 6 de ellos en Chile y 3 en Concepción.