Por norma, ver una pelea entre un oso pardo norteamericano y un lobo salvaje sería un enfrentamiento de proporciones épicas… claro, salvo que ambos tengan unos cuantos meses de edad.

Este es el caso de Lil’ Bear y Tala, dos cachorros de oso y lobo, respectivamente, que viven en el parque zoológico de Woodland en Seattle, y que no sólo aprendieron a convivir sino que juegan como buenos amigos.

La mayor sorpresa sin embargo es que estas imágenes datan de hace 6 años. Actualmente, ambos animales son adultos, pero siguen haciéndose compañía, como muestran las fotos intercaladas en el video.

http://youtu.be/vL8x7LcA-Y4