El vicepresidente de Colombia, Angelino Garzón, defendió este viernes en Roma su candidatura a la dirección general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), considerando que su país tiene “la experiencia, los conocimientos y la voluntad” para dirigir esa entidad.

“Tenemos toda la experiencia, todos los conocimientos y toda la voluntad para asumir la dirección de la OIT. Aunque reconocemos los méritos profesionales de otros candidatos, como el de Francia, Holanda, Malasia, Níger y Senegal, que son los que se conocen hasta ahora públicamente”, afirmó Garzón en Roma durante una charla con la prensa.

Garzón, que llegó el jueves a Italia procedente de Turquía, donde se entrevistó con líderes sindicales y empresariales, se reunió en Roma en la sede del Instituto Italo Latinoamericano (IILA) con una nutrida representación de empresarios, políticos y autoridades del nuevo gobierno dirigido por el tecnócrata Mario Monti.

“Italia no ha decidido aún a quien dará el apoyo, aunque estoy de acuerdo de que el criterio debe basarse en el mérito y la ética”, aseguró a la AFP la viceministra de Relaciones Exteriores, Marta Dassu, al margen del encuentro con Garzón.

El vicepresidente se reunirá el sábado en Turín, histórica sede la Fiat, con el alcalde de esa ciudad, Piero Fassino, así como con representantes de las tres mayores centrales sindicales italianas (Cgil, Cisl, Uil).

El dirigente colombiano, reconocido sindicalista y político de 65 años, cuenta con el respaldo de al menos 17 países latinoamericanos, incluidos Brasil, México y Argentina.

Sin embargo, su candidatura a la OIT ha recibido críticas por parte de algunos sectores sindicalistas que consideran que Colombia no puede aspirar a tal cargo dado que figura entre los países que más líderes sindicales han sido asesinados: 28 en el sólo año de 2011, según fuentes de prensa local.

“No negamos los problemas que hemos tenido, somos conscientes del daño de la violencia irracional por la existencia de organizaciones armadas ilegales. Esa violencia ha dejado millones de víctimas. No somos prisioneros ni del dolor ni del miedo que ha generado esa violencia”, dijo.

“Colombia a la comunidad internacional le dice que ha enfrentado esa violencia ampliando la democracia. Ningún derecho ha sido derogado (…) Sería una contradicción si Colombia no respeta esos derechos”, subrayó.

“Si hay otro candidato que reúna mejores condiciones para ocupar el cargo nosotros estamos dispuestos a retirar la candidatura”, subrayó Garzón, quien admitió que “no aspiro al cargo por el cargo”.

“Queremos contribuir a que la OIT logre responder a los inmensos desafíos del siglo XXI y acabar con el mayor absurdo de todos: hay 215 millones de niños trabajando en el mundo y millones de adultos desempleados”, comentó.

La dirección general de la OIT quedará vacante anticipadamente cuando el chileno Juan Somavía la abandone en septiembre de 2012, dos años antes de terminar su período y tras 13 años al frente del organismo.

El cierre para las candidaturas ha sido fijado para el 9 de marzo y la elección se celebrará el 28 de marzo en Ginebra, Suiza, con la participación de 28 gobiernos, 14 delegaciones de trabajadores y 14 de empresarios.

El vicepresidente colombiano inició su carrera política en el Partido Comunista, fue miembro de la Asamblea Constituyente de 1991 y ministro de Trabajo entre 2000 y 2002. Como sindicalista ha dirigido la Confederación Sindical de Trabajadores de Colombia y la Central Unitaria de Trabajadores.