Un ex ministro indio se sentó este viernes en el banco de los acusados al iniciarse en Nueva Delhi el proceso sobre un sonado escándalo de corrupción en el sector de telecomunicaciones, que salpicó al gobierno del primer ministro Manmohan Singh.

A. Raja, ministro de Telecomunicaciones de 2007 a 2010, es el principal acusado en este caso de presunta venta fraudulenta de licencias de telefonía móvil en 2008, revelado en el otoño boreal de 2010.

El ex ministro está acusado de vender a bajo precio estas licencias, a cambio de sobornos, a operadores previamente seleccionados. Según una auditoría, esta venta habría expoliado al Tesoro hasta 40.000 millones de dólares.

Raja, de 48 años, apareció ante el tribunal junto a otros 13 acusados, altos funcionarios y directivos de empresas de telecomunicaciones, acusados de abuso de confianza, fraude y falsificación.

La sala estaba repleta de familiares de los acusados, de periodistas y de curiosos para asistir al inicio de este juicio, considerado el más importante de los últimos años.

El gobierno, dirigido por el partido del Congreso, y en particular el primer ministro, fueron acusados de haber cerrado los ojos ante la venta de licencias para evitar perder un partido aliado, al que pertenecía el entonces ministro Raja, en el seno de la coalición gubernamental.