Un quiebre interno se produjo en la UDI del Bío-Bío, esto luego de reunión privada, sostenida por personeros gremialistas, para otorgar apoyo senatorial a Jorge Ulloa, presidente regional del partido. Sus detractores criticaron su gestión como timonel local y lo acusaron de ejercer el “caudillismo”.

El viernes previo a fin de semana largo, en un hotel céntrico de Concepción la UDI región del biobio, incluida su dirigencia, se sometió a una jornada de reflexión, donde se analizó el rumbo del gremialismo local, buscando la “tormenta de ideas” que les hiciera retomar el camino del diálogo interno y evitar el quiebre.

Luego el viernes recién pasado sólo un grupo de ellos incluidos algunso jefes de servicio, y diputados como Iván Norambuena, Sergio Bobadilla y Jorge Ulloa, asistieron a un encuentro privado en un restaurant penquista.
Para nadie es novedad ninguno de los encuentros, ni tampoco los bloques que se contraponen en la fuerza política de gobierno.

Unos en la línea de Jacqueline Van Rysselberghe, otros en la de Jorge Ulloa, y la disputa central: el futuro cupo senatorial.

El ex seremi de Gobierno, Francisco Ibieta, confirmó las divisiones internas y lanzó crítica directa a Ulloa, incluso llámandolo caudillo.

La misma línea siguió el alcalde de Pinto, Fernando Chávez, figura emblemática de la UDI, a partir de la posibilidad de ser el postulante a diputado por Ñuble.

Los militantes, como si fuera partido de fútbol se ponen detrás de uno de los dos precandidatos, Ulloa y Van Rysselberghe, incluso por estos días algunos cambian de bando y se cruzan en sus respaldos. Los otroras prohombres de la ex Intendenta están con Ulloa y viceversa.