El tribunal de la ONU celebró este miércoles una primer audiencia sobre el caso del ex alto responsable de la organización que reclama un millón de dólares por daños, ya que asegura que fue despedido tras probar sobornos a miembros de la ONU en Kosovo.

James Wasserstrom perdió un trabajo de alto nivel en la misión de la ONU en Kosovo, UNMIK, tras cooperar con una investigación interna sobre corrupción.

Su caso es el más importante que se ha tratado hasta el momento en el Tribunal de Disputas de la ONU, que se puso en marcha hace dos años como parte de las reformas realizadas tras el escándalo de petróleo por comida a principios de la década de 2000.

Wasserstrom dice que las pruebas que dio sobre los sobornos que recibían los oficiales de la ONU en Kosovo en 2007 fueron comunicadas a los propios acusados.

Asegura que fue detenido por la policía del UNMIK, que su casa fue registrada y que se cerró su oficina.

El que por entonces era empleado de la misión de Kosovo fue despedido más tarde pero una investigación interna llegó a la conclusión de que no existían pruebas de que hubiera perdido su trabajo a causa de sus actividades como “topo”.

Wasserstrom, quien es ahora un especialista en temas anti-corrupción de la embajada de Estados Unidos en Kabul, demanda una compensación por haber perdido su trabajo, así como por la angustia psicológica que sufrió a causa del tratamiento que le dispensaron.

El juez Goolam Meeran, del Tribunal de la ONU, escuchó este viernes el testimonio de las abogadas de Wasserstrom, Mary Dorman y Susan John, que trabajaban en la Oficina de Ética de Naciones Unidas en el momento del caso.

Wasserstrom dijo que esperaba que el nuevo sistema de justicia interna de la ONU, puesto en marcha hace dos años, pudiera proporcionarle a él y al resto de los empleados “acceso abierto” a la justicia.

“Hemos establecido muchos precedentes en este caso que han abierto claramente las puertas dentro de Naciones Unidas”, dijo Wasserstrom a la AFP.

“Es muy importante que establezcamos precedentes para que las cosas terribles que me pasaron a mí no les sucedan a otras personas”, añadió.