El ex ministro francés del Interior Brice Hortefeux, muy cercano a Nicolás Sarkozy, llamó por teléfono a uno de los allegados al presidente francés procesado por corrupción para avisarle que su mujer estaba “hablando demasiado”, según el sitio internet de Le Monde.

“Está hablando demasiado, Hélène”, advirtió por teléfono el ex ministro a Thierry Gaubert, consejero de comunicación de Sarkozy hasta mediados de los 90, procesado esta semana por el juez Renaud Van Ruymbeke que investiga el capítulo financiero del llamado “caso Karachi”.

Según Le Monde, esta conversación, que tuvo lugar el 14 de septiembre, días antes del procesamiento de Gaubert, prueba que Hortefeux tuvo acceso a las declaraciones ante el juez de la princesa Hélène de Yugoslavia, separada de su marido, antes de que fueran agregadas al sumario.

“Tienen muchas cosas”, afirmó Hortefeux. “¿Hablaste con Bazire? Porque parece que está en esta historia”, agregó el ex ministro de Sarkozy.

Nicolás Bazire, jefe de gabinete del ex primer ministro Edouard Balladur (1993-1995) y director de su campaña para las elecciones presidenciales de 1995 en las que su jefe perdió frente a Jacques Chirac, también fue inculpado por el juez esta semana.

Van Ruymbeke -que interceptó las comunicaciones telefónicas de Gaubert- investiga un presunto circuito financiero establecido para la venta de submarinos a Pakistán -y fragatas a Arabia Saudita- en 1994 que posibilitó el retorno de forma ilegal a Francia de parte del dinero que habría servido para financiar la campaña presidencial de Balladur.

El juez está averiguando los vínculos de Bazire y Gaubert con el empresario franco-libanés Ziad Takieddine, intermediario en la venta de armas, inculpado el mismo día en que fue grabada la referida comunicación telefónica.

Nicolás Sarkozy era ministro de Presupuesto y portavoz de esa campaña.

Hortefeux era jefe de gabinete de ese ministerio y se ocupaba de organizar los mitines de Balladur.

Este jueves, tras la inculpación de Bazire y Gaubert, la presidencia francesa desmintió cualquier vínculo entre el presidente y la financiación de la campaña de Balladur que atribuyó a una “manipulación politiquera” y llegó a afirmar que Sarkozy “no fue citado por ningún testigo o participante en este caso”.

Los sindicatos de jueces salieron al cruce de ese comunicado fustigando las “incursiones escandalosas” del ejecutivo en la actividad de la justicia.

Bazire, testigo de casamiento de Nicolás Sarkozy y Carla Bruni en febrero de 2008, es número dos del grupo de lujo LVMH de Bernard Arnault.

Según el sitio Mediapart y la revista Le Nouvel Observateur, la ex esposa de Gaubert dijo al magistrado que su marido acompañó a Suiza a Takieddine en 1994 y 1995 para buscar maletines “llenos de billetes” que entregaba a Bazire, que en su oficina tenía una caja fuerte.

Según lemonde.fr, Gaubert reconoció que abrió varias cuentas bancarias en el extranjero para depositar fondos no declarados y también admitió que esos fondos provenían de Takieddine pero no de contratos de armas.

Negó haber entregado dinero en efectivo a Bazire.

Un ex empleado de tesorería del entonces candidato Balladur, Alexandre Galdin, afirmó al juez que llevó al banco unos veinte maletines que contenían hasta 500.000 francos, pensando que eran “fondos secretos” de gobierno.

La red de corrupción que está en la lupa del juez empezó a ser investigada a raíz del atentado que el 8 de mayo de 2002 costó la vida en Karachi (Pakistán) a 15 personas, entre éstas 11 franceses que trabajaban en la construcción de los submarinos y que durante muchos años fue atribuido a la red Al Qaida.