Más de 100 personas murieron el lunes en la explosión y el incendio de un oleoducto en un suburbio pobre de Nairobi, la capital de Kenia, anunció la policía.

“Estimamos la cifra de muertos en más de 100″, dijo a la AFP Thomas Atuti, jerarca policial de la zona.

La explosión se produjo en la zona industrial de Lunga Lunga, rodeada por el barrio marginal de Sinai, de casas precarias, densamente poblada.

“Hubo una pérdida en la canalización y la gente trataba de recuperar combustible”, declaró un habitante del barrio, Joseph Mwego.

“Se produjo una fuerte explosión y un incendio con inmensas llamas y columnas de humo”, agregó Mwego.

“La gente intentaba extraer petróleo de la canalización”, confirmó a la AFP un responsable de la Cruz Roja, que envió un equipo de socorristas al lugar.

Un periodista de la AFP vio varios cuerpos carbonizados cerca del lugar de la explosión.

Los bomberos intentaban contener el fuego, mientras que la policía intentaba alejar a los vecinos del lugar de la catástrofe.

En 2009, 122 personas habían muerto en el oeste de Kenia en la explosión de un camión cisterna, que se había volcado y del cual la gente intentaba extraer gasolina.