Los rebeldes libios sabotearon un oleoducto, en la región de Jebel Nefusa, montañas rebelde al sudoeste de Trípoli, que alimenta la única refinería que aún funciona en el país, dijo el jueves el viceministro libio de Relaciones Exteriores, Khaled Kaaim.

“Los rebeldes cerraron una válvula del oleoducto y pusieron gran cantidad de concreto encima, en la región de Al Rayaniya”, dijo Kaaim en una conferencia de prensa, en la que señaló una escasez electricidad en Trípoli y alrededores.

El viceministro dijo que el oleoducto alimenta la refinería de Zawiyah, 50 km al oeste de Trípoli, con el gas y combustible, que es utilizado luego para generar electricidad.

Indicó asimismo que la OTAN bombardeó una turbina de gas en la misma zona y una estación de alta tensión en Jefara, al sudoeste de Trípoli.

Varios habitantes de los suburbios de la capital informaron a la AFP el jueves sobre cortes de electricidad cada vez más frecuentes, que a veces duran varias horas, así como la escasez de bombonas de gas para cocinar, que se agrega a la escasez de combustible.