El principal partido de la extrema derecha danesa aseguró este jueves que sus adversarios políticos tratan de amordazarlo después de los ataques cometidos el 22 de julio por un extremista noruego que admitió compartir algunas ideas sobre el problema de la inmigración.

“Nuestros opositores políticos tratan de ilegalizar nuestras opiniones (…) Tratan de reducirnos al silencio”, denunció Soeren Espersen, uno de los principales dirigentes del Partido del Pueblo Danés (DF), en una entrevista concedida a la AFP.

Espersen deploró que su partido sea blanco de críticas con el pretexto de que comparte algunos puntos de vista con Anders Behring Breivik, autor de un atentado con bomba y un tiroteo que mataron a 77 personas en Noruega, en lo que él mismo describe como “una cruzada” contra “la invasión musulmana”.

Al igual que Breivik, “queremos que se detenga la inmigración en masa”, pero “hay un abismo entre el debate político y la violencia”, dijo Espersen. “Nosotros no aceptamos la violencia”, insistió.

Este político danés negó que el extremista noruego se haya inspirado en parte del discurso político del DF para cometer sus actos, tal como dijeron varias personalidades, entre ellas el cineasta Lars von Trier.