La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, condenó este sábado el asesinato de un policía católico de Irlanda del Norte en un atentado y calificó al hecho de “acto cobarde”.

“Los perpetradores de este acto cobarde representan las fallas del pasado, y sus acciones van contra los logros, aspiraciones y voluntad colectiva del pueblo de Irlanda del Norte”, señaló Clinton en un comunicado.

Ronan Kerr, un policía católico de 25 años, murió este sábado al estallar su coche, en donde le habían escondido una bomba, delante de su domicilio en Omagh, un centenar de kilómetros al oeste de Belfast en Irlanda del Norte, indicó la policía.

Hasta el momento, ningún grupo reivindicó el atentado contra el policía. No obstante, políticos señalan hacia los republicanos disidentes, que se oponen al proceso de paz.

“Nuestros pensamientos están con la familia y los seres queridos de este joven que perdió la vida debido a su decisión de servir a toda la comunidad”, señaló Clinton.

“Nos hacemos eco de las inequívocas condenas de los políticos de Irlanda del Norte e instamos a todo aquel que posea información a que coopere total y expeditamente con la Policía de Irlanda del Norte”, agregó.

El ex presidente Bill Clinton, esposo de la actual secretaria de Estado, facilitó las negociaciones que llevaron al acuerdo de paz en 1998.