El órgano internacional regulador de direcciones en internet autorizó el viernes el uso del dominio “.xxx” para páginas web de contenido sexual explícito, pero postergó su decisión sobre la posibilidad de abrir las puertas a dominios con otros sufijos.

La Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números, ICANN en inglés, votó aprobar una petición de agregar el sufijo .xxx a la lista de “dominios genéricos de alto nivel”, que incluyen .com, .net y .org.

No obstante, las resoluciones consideradas por el consejo en su reunión pública anual, que terminó en San Francisco, no incluyeron la posibilidad de aprobar los lineamientos que despejarían el camino para prácticamente cualquier terminación de internet.

“Creemos que estamos muy cerca de una política viable”, había dicho el presidente de la ICANN, Peter Dengate Thrush, antes de la reunión a la AFP. “Todo esto es parte de la misión de crear competencia, diversidad y elección”.

Desde hacía varios años la ICANN ha estado elaborando una guía para aprobar las solicitudes de todos los dominios sugeridos de alto nivel.

El proceso halló controversia luego de la preocupación de una facción del gobierno, que pedía que se impusiera el veto para evitar la creación de dominios como .gay, por ejemplo, que podría ser bloqueado en algunos países.

Esta facción teme que si los países pueden bloquear dominios enteros, ello podría conducir a una ‘balcanización’ de internet.

Dengate Thrush descartó esa preocupación al afirmar que el contenido adulto está en internet independientemente de si el sitio web termina en .gay o en cualquier otro de los sufijos existentes. El contenido “no cambia si el sitio web se transforma en .gay”, explicó.

No obstante, el consejo de la ICANN sí aprobó la petición de operar con un dominio .xxx. El pedido había sido rechazado hace unos cinco años y fue reconsiderado tras una apelación.

Rita Rodin Johnston, miembro de la junta, dio su voto a favor afirmando que había quedado “entre la espada y la pared”.

“Nunca tuve tantos sentimientos encontrados como con esta decisión del .xxx”, dijo.

Otro temor cosistía en que el gobierno terminara creando versiones de los barrios rojos en internet, obligando a los sitios web a formar una comunidad .xxx que luego pudiera ser monitoreada o bloqueada.

No es obligatorio que los sitios pornográficos usen el dominio .xxx, pero los estudios estarán bajo presión para inscribirse allí para proteger marcas registradas y evitar que personas confundidas los busquen en internet.