La Agencia Europea del Medicamento (EMEA) anunció este viernes que está investigando una eventual conexión entre una de las vacunas administradas contra la gripe H1N1 y varios casos de narcolepsia detectados en Finlandia y Suecia.

La EMEA precisó en un comunicado que lanzó la investigación sobre el Pademrix, producido por el laboratorio británico GlaxoSmithKline (GSK), a petición de la Comisión Europea, después de que se señalara “un número limitado de casos” de narcolepsia, un trastorno del sueño de origen neurológico, principalmente en los dos países mencionados.

Según esta agencia que tiene su sede en Londres, “al menos 30,8 millones de europeos” fueron vacunados con Pandemrix durante la pasada pandemia.

Las autoridades sanitarias finlandesas recomendaron esta misma semana la suspensión del uso de Pandemrix hasta que se conozcan los resultados de una investigación sobre el aumento de los casos de narcolepsia registrados este año entre niños que recibieron la vacuna.

Suecia también está investigando una eventual relación entre el Pandemrix y la narcolepsia.

La EMEA señala sin embargo que “aunque los casos de narcolepsia se han señalado en asociación temporal con el uso de Pandemrix, actualmente no se sabe si la vacuna causó la afección”.

La narcolepsia es una enfermedad poco frecuente cuya causa exacta se desconoce y que se caracteriza por una somnolencia diurna excesiva.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el pasado 10 de agosto el fin de la pandemia de gripe H1N1, que dejó 18.500 muertos en todo el mundo tras su identificación en abril de 2009 en América del Norte.

El anuncio de la primera pandemia del siglo XXI sembró el pánico y provocó la producción de millones de dosis de vacunas y antivirales que finalmente fueron poco utilizadas por los gobiernos, debido a que la difusión de la enfermedad fue menos importante de lo previsto.