Asombro causó la información revelada por La Radio, debido al traslado de sangre bajo responsabilidad de los familiares de pacientes, en una práctica que – pese a que la dirección del hospital base de Osorno calificó de casos muy puntuales – Bío-Bío confirmó que es más habitual de lo que se piensa.

La crítica hacia esta situación apunta a lo comprometedor que resulta tan particular “encargo” y la carencia de medidas que aseguren el buen traslado de la sangre.

Tras conocer la información, el director del Hospital Base de Osorno, doctor José Ochoa se limitó a señalar que se trata de una medida “extrema” y que solo se otorga en casos muy puntuales.

Sin embargo, algunos auditores de La Radio, refutaron los dichos del directivo, señalando que si bien se entiende que puede responder a una demanda urgente ligada a la sobrevivencia de un paciente, es una responsabilidad muy alta que se asume al trasladar este tipo de flujo.

Tal como lo dijo Evelyn, quien vivió de cerca la situación de una amiga que debía trasladar sangre a Valdivia

También hay quienes asumen los riesgos de ésta operación, esgrimiendo que constituye una oportunidad de prolongar la vida de un ser querido, como en el caso de Erta.

Más allá del gesto humanitario que pueda resultar agilizar la entrega de sangre a un paciente mediante el concurso de familiares que apoyen en el traslado, se trata de una práctica que preocupa al tratarse de un procedimiento que debe contar con precauciones.