La negociación entre Uruguay y Argentina por el monitoreo ambiental de un río compartido “no está trancada” y ambas partes siguen analizando las propuestas presentadas en el último encuentro de la semana pasada, dijo el lunes el canciller uruguayo Luis Almagro.

“Nosotros tenemos un compromiso muy fuerte con la negociación y no vamos a cerrar nunca las puertas”, aseguró Almagro, quien agregó que su gobierno considera fundamental seguir trabajando y buscando la forma de llegar a una solución definitiva.

“Hay que seguir trabajando”, señaló el canciller en conferencia de prensa, indicando que falta ajustar “algunas cosas”.

Añadió que ambas partes están de acuerdo en el papel que la ciencia debe tener en el control de la planta de celulosa UPM (ex Botnia), a la que ambientalistas argentinos acusan de contaminar el río Uruguay, compartido por ambos países.

El domingo, el canciller argentino, Héctor Timerman, pidió dejar que científicos controlen en forma permanente el impacto ambiental de las actividades industriales que se realizan en ambas márgenes de un río fronterizo con Uruguay, eje de un diferendo bilateral.

Ambos países esperan consensuar un dilatado acuerdo para su firma en la cumbre presidencial del Mercosur, que se realizará el 2 y 3 de agosto en la ciudad argentina de San Juan (noroeste).

El conflicto lleva 6 años e incluyó un bloqueo de ruta en el principal paso de frontera que ambientalistas argentinos mantuvieron cerrado por tres años y medio.

Los ministros uruguayo y argentino se encontrarán el jueves en Ecuador en el marco de la reunión de cancilleres de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).