Un coche-bomba estalló la noche del domingo al lunes cerca de las instalaciones del MI5, los servicios británicos de seguridad interior, en Irlanda del Norte sin causar víctimas, indicó la policía.

La explosión se produjo unos minutos después recuperar Belfast las competencias de policía y justicia después de 40 años en manos de Londres.

“Un artefacto estalló en un vehículo situado en la parte trasera del Palacio Cuartel Holywood”, indicó una portavoz policial.

El cuartel, situado a la salida de Belfast, perteneció al Ejército británico y ahora alberga la sede del MI5, donde trabajan cientos de personas.

“La explosión ocurrió hacia las 00.24 horas del lunes. No se señalaron víctimas de consideración hasta el momento”, agregó la portavoz.

Los servicios de seguridad confirmaron que la bomba estaba dentro de un taxi secuestrado y conducido hasta la parte de atrás de las instalaciones del MI5. El conductor saltó del vehículo gritando que se trataba de una bomba.

La asamblea regional de Irlanda del Norte aprobó a primeros de marzo un acuerdo histórico entre católicos y protestantes sobre el traspaso de las competencias de policía y de justicia de Londres a Belfast, último obstáculo para la aplicación de los acuerdos de paz de 1998.

El acuerdo fue alcanzado en febrero tras más de una semana de arduas negociaciones entre el protestante Partido Unionista Demócrata (DUP) y el católico Sinn Fein, socios en el gobierno regional.

La transferencia de los poderes de policía y justicia era la última etapa para la aplicación total de los acuerdos de paz de 1998, que pusieron fin a 30 años de violencia entre ambas comunidades en Irlanda del Norte, con un balance de unos 3.500 muertos.