Tras ocho años de tramitaciones, la Corte de Apelaciones de Concepción aplicó duras penas de cárcel a los autores del homicidio de dos hermanos pehuenches, Agustina y Mauricio Huenupe Pavian, ocurrido el 2002 en el Alto Bío-Bío.
Una masacre sufrió la familia Huanupe Pavian el 13 de julio de 2002, en el sector Cauñicu del Alto Bío-Bío. Fueron sus propios hermanos de comunidad quienes los atacaron por sorpresa, sin importar la presencia de mujeres y niños, a quienes golpearon y dispararon, básicamente porque consideraban que los estaban traicionando por tener contactos con los dirigentes del Consejo de Todas las Tierras.
Muchas de las víctimas debieron ser llevadas de urgencia al hospital de Santa Bárbara, pero los hermanos Agustina y Mauricio Huenupe Pavian no resistieron las heridas y murieron en el lugar.
La justicia procesó a 15 personas, entre comuneros pehuenches y colonos del Alto Bío-Bío, a quienes la Corte de Apelaciones de Concepción, aplicó duras penas de cárcel.
Ochos de los acusados, entre ellos el autor principal de todo el ataque, Jose Maripil Porteño, fueron condenados a 15 años de prisión, mientras que otros seis recibieron castigos de 10 años de cárcel.
La única pena leve fue para Jorge Cabezas González, quien recibió 541 días por no estar involucrado en el doble homicidio de los hermanos Huenupe Pavian.
