Dos médicos del centro asistencial “Gonzalito” y la contadora del recinto fueron formalizados por vender casi 3.000 licencias médicas durante 2 años, lo que significó defraudar al sistema por alrededor de 130 millones de pesos.

Uno de los facultativos es José Morales Arellano quien al salir del 7º Juzgado de Garantía, Morales aseguró que no ser él quien firmó esos permisos fraudulentos, por lo que su defensa pidió pericias caligráficas, para comprobar que no es su letra la que rellenó los formularios.

Uno de los querellantes de este caso es el Fondo Nacional de Salud (Fonasa) y su abogado, Gonzalo Ehijo, explicó que decidieron hacerse parte del caso porque este par de médicos los estafó por más de 70 millones de pesos.

La fiscal que lleva el caso, Giovanna Herrera, explicó que lo que se viene ahora es identificar y localizar a los más de 200 pacientes que se atendieron en este centro médico que al igual que sus doctores deben responder ante la justicia.