Un segundo enfermo infectado por una bacteria que posee un gen capaz de hacerla resistente a un tipo de antibióticos de último recurso, fue identificado en Estados Unidos.

El gen MRC-1, bastante inusual, fue encontrado en una raíz de la bacteria Escherichia coli (E. coli) en un enfermo en Nueva York, según publicó la revista Antimicrobial Agents and Chemotherapy, de la Sociedad estadounidense de microbiología.

En mayo, las autoridades sanitarias habían detectado por primera vez la bacteria portadora del gen en Estados Unidos en una enferma de 49 años hospitalizada en Pensilvania por una infección urinaria. La mujer se repuso de la enfermedad.

El gen MRC-1 es temido porque hace las bacterias resistentes a la Colistina, un antibiótico que data de 1959 y que es utilizado como último recurso frente a las enterobacterias a los antibióticos del tipo de los carbapenemas (ERC).

Por lo demás, este gen tiene la capacidad de pasar de una bacteria a otra, lo que podría propagar la resistencia a otras especies bacterianas, un escenario catastrófico, según las autoridades.

Esta segunda identificación en Estados Unidos fue hecha gracias a una cooperación mundial conocida como “Programa Sentry de Vigilancia Antimicrobiana”.

Los investigadores examinaron 13.525 muestras de E.coli y 7.481 raíces de enterobacterias Klebsiella pneumoniae recogidas en 2015 en hospitales del mundo entero. En total, 1,9% (390) de esos agentes microbianos eran resistentes a la Colistina y 19 eran portadores del gen MCR-1.

En los dos casos registrados en Estados Unidos, las bacterias portadoras del gen MCR-1 resistían a la Colistina pero eran sensibles a otros antibióticos, lo que permitió combatir la infección eficazmente.

Con una tasa de mortalidad que puede llegar a 50%, las enterobacterias resistentes a los carbapenemas son consideradas por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos como una de las más grandes amenazas de salud pública.