Bajar de peso no es una tarea fácil. No sólo requiere de un gran esfuerzo físico y una fuerte voluntad para comer sano, sino que también requiere de mucha constancia.
Así lo demostró un fotógrafo chino llamado Jesse quien decidió que quería cambiar completamente su aspecto físico. Sin embargo, el artista de 32 años no quiso hacerlo solo e invitó a toda su familia a acompañarlo en la labor.
Según contó en las redes sociales Weibo y Facebook, todo empezó cuando su madre decidió mudarse temporalmente con él y su esposa para ayudarla en las primeras semanas de la maternidad. Jesse no sólo aceptó, sino que también invitó a su padre a vivir junto a ellos.
Una de las motivaciones más fuertes que tuvo Jesse fue ayudar a su padre a salir de su alcoholismo y enseñarle un nuevo estilo de vida, saludable.
Así comenzaron ambos a trotar, a lo que se unieron -en poco tiempo- su esposa y mamá. Después la familia se apuntó en un gimnasio y empezaron a fotografiarse cada 10 días para ver los cambios.
Si bien los chinos acordaron que su entrenamiento duraría seis meses, hoy es su estilo de vida. Así lo muestra Jesse en sus redes sociales quien admite que lo mejor es evidenciar el cambio de su progenitor.
“Lo más gratificante es ver a mi padre
convertido en un hombre seguro de sí mismo”, expresa.
A continuación revisa las fotos del “antes y después” de la familia.
