Una terrible “broma” de mal gusto le costó su trabajo y reputación a una chef británica. La cocinera de 47 años decidió “romper” la dieta vegana de una clienta a sus espaldas, provocando una ola de críticas.

Laura Goodman llevaba un buen tiempo trabajando como cocinera de comida italiana en un restaurante llamado Carlini, ubicado en Shropshire (Inglaterra), cuando le tocó atender a una clienta que le solicitó un menú vegano para un evento, o sea, libre de productos de origen animal.

Según explica el novio de Laura, Michael Gale, quien es uno de los dueños del restaurante, la mujer pasó mucho tiempo diseñando el particular menú; sin embargo, la clienta prefirió cambiar de opinión en último minuto y eligió algo que ya estaba en la carta, contó el portal británico The Telegraph.

Laura y Michael
Laura y Michael

Al parecer, lo anterior enojó profundamente a la chef, quien decidió “vengarse” de la clienta y sus invitados. “Una piadosa cliente vegana (para quien estuve trabajando todo el día) acaba de irse a dormir pensando que sigue siendo vegana”, escribió Laura en su cuenta de Facebook… cometiendo el peor error de su carrera.

En pocos minutos, sus propios colegas comenzaron a criticar la irresponsabilidad de la mujer y la falta de respeto al cliente. Sin embargo, la situación empeoró cuando la publicación llegó a ojos de animalistas y veganos.

“Alimentar con una comida no vegana a alguien que ha tomado la decisión compasiva o médica de no comer productos animales intencionalmente es vergonzoso y luego jactarse de ello en su página de Facebook, es lamentable. Espero que esté avergonzada de sí misma”, escribió uno de los usuarios.

Carlini
Carlini

De esta forma, una enorme ola de repudio creció contra Laura, viralizando rápidamente su mensaje. Según relata el portal, lo anterior, la llevó a pedir disculpas públicas por su incompetencia y a renunciar de su puesto.

Con objeto de defender a su novia y a su local, Michael expresó que Laura “había tenido un mal día y había bebido demás”. “Fue una frase estúpida en un grupo cerrado. Está arrepentida”, escribió y confesó que, a pesar de ello, no trata de excusar lo que hizo.

“Queremos asegurarles a todos que las comidas estuvieron todas preparadas de acuerdo con nuestros altos estándares habituales y de acuerdo con la Agencia de Normas Alimentarias. No se utilizó carne en ninguno de los platos”, señaló el hombre ante las masificación de la historia ocurrida en su restaurante, el que sufrió una caída en su reputación en el sitio web de recomendaciones para viajeros TripAdvisor.

Por su parte, la cocinera ha recibido tantos mensajes de odio que “ya no puede ni salir de su casa”, afirmó el portal.