Desde que Adolf Hitler convirtió a la esvástica en un símbolo nazi, ésta pasó a transformarse en un signo sinónimo de odio, intolerancia y muerte. Es por ello que para muchas personas es muy desagradable ver esta particular “cruz” dibujada en lugares públicos, tales como murallas o aceras.
Así le sucedió a un hombre en Berlín (Alemania) quien salió junto a su hijo para jugar en una plaza. En vez de pasar una tarde agradable con el niño, el padre se encontró con una enorme bandera Nazi pintada en una pared adyacente.
Es por lo mismo que se acercó a una tienda de graffiti con objeto de comprar algunas latas de pintura para cubrir el símbolo. Así lo recuerda Ibo Omari, dueño de la tienda llamada Legacy BLN, quien le negó su compra al hombre con una noble promesa: “Le dije: ‘nosotros nos preocuparemos de eso: no gaste dinero, no se ensucie las manos”.
De esta forma nació #PaintBack (Píntalo de vuelta), un movimiento de artistas y aficionados a la pintura que se dedica a pintar sobre las esvásticas en los lugares públicos, transformándolas en bellos graffitis.
Según cuenta Ibo, lo primero que hicieron fue cubrir la bandera nazi de la plaza, que había visto el hombre, y luego de ello se dedicaron a cubrir más de 50 ejemplares en un corto lapso de tiempo. “Fuimos ahí e hicimos algo hermoso con eso”, recuerda.
En un par de meses, la iniciativa se extendió por todo el mundo y hoy figuran miles de diseños por internet. En tanto, los artistas detrás de la marca que inició el movimiento se han manifestado muy orgullosos con el impacto que lograron.
Aquí puedes ver algunos de los graffitis que han logrado cubrir este símbolo nazi.
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