El pasado lunes un bote arribó a una playa de la costa noroeste de la isla Honshu, en Japón. Lo que descubrieron en su interior impresionó a todos: ocho cadáveres, en parte reducidos a esqueletos.

Aunque las autoridades, a través de la Guardia Costera, investiga el origen de la embarcación para clarificar las identidades y nacionalidades de los cuerpos, todo indicaría que se trata de ciudadanos norcoreanos.

Sin embargo, y a pesar del macabro hallazgo, no es el primer caso de “barco fantasma” que se ha registrado en el último tiempo.

Tal como recoge la agencia de noticias AFP, durante el fin de semana otros dos cadáveres fueron hallados en las costas de la isla japonesa de Sado, en las cercanías de un barco de madera.

Según explicó un oficial de la policía local, todo hace pensar que se trataría de pescadores provenientes de Corea del Norte. De hecho, en las ropas de uno de ellos se encontró una cajetilla de cigarros de aquel país.

Agence France-Presse
Agence France-Presse

Estos dos casos se suman a otros 8 cuerpos que fueron ubicados por la policía en un embarcadero la semana pasada. De acuerdo a lo que recoge el periódico español ABC, se trataría también de pescadores cuya embarcación se habría visto en problemas.

Satoru Miyamoto, profesor del Seigakuin University y experto en temas relacionados a Corea del Norte, explicó a CNN que los casos de barcos encallados en las costas de Japón han aumentado considerablemente en los últimos años.

A su juicio, esto se debería a que el gobierno de Kim Jong Un ha decidido expandir la industria de la pesca como una forma de aumentar los ingresos de los militares, utilizando a personas que no tienen los suficientes conocimientos sobre navegación.

Cabe señalar que a fines de 2015 una serie de barcos aparecieron en las costas de Japón, cargados de esqueletos sin cabeza y de cadáveres en estado de putrefacción. Tal como en los hallazgos recientes, todas la hipótesis estuvieron relacionadas con Corea del Norte.

“Una serie de indicios dan a creer que se trata de barcos fletados por disidentes norcoreanos deseosos de huir de su empobrecido país, aunque también podría tratarse de pescadores enviados por el gobierno de Pyongyang para faenar en aguas remotas y traer más comida a casa”, explicó la agencia AFP en aquella oportunidad.