Testarudo, obstinado y competitivo. De esta manera los expertos en grafología definen la personalidad del presidente norteamericano Donald Trump, basándose en su firma.
A través de la revisión de diversas imágenes de los documentos y órdenes ejecutivas decretados por el mantario, la analista de escritura manual Sheila Lowe concluyó que el alargado, contundente y regular trazado de su firma tiene “la calidad de una reja de alambre de púas”.
Según consignó el periódico español ABC, Lowe sostiene que “no hay nada amigable o abierto sobre esta firma”. Agrega que la altura de los trazos más amplios, además del diseño extremadamente angular de la letra, “muestran a una persona que está impresionada por su propio poder”.
Por su parte, el profesor de primaria Michael Fernández destacó la “pulcritud” en la caligrafía de Trump, aunque precisó que “hace caso omiso al alfabeto en favor de un sismógrafo” debido a la forma de sus letras.
La grafóloga Sandra Cerro, comentó al sitio de la agencia RT que la firma del magnate es bastante angulosa, “marcando lo que llamamos ‘dientes de sierra’, que son esos ángulos tan pronunciados”.
De acuerdo a Cerro, “la cohesión interletras es ligada, no se para entre letra y letra, sino que hace el gesto continuo, uniendo unas letras con otras”. En relación a la forma de terminar la firma, indica que es “contundente, marcando mucho el gesto de arriba a abajo con un trazo final bastante pronunciado”.
Para la experta, esto revela que Trump es el típico “líder dictatorial de tipo coercitivo”. “Es el líder del yo ordeno y yo mando, más autoafirmador que realizador, que demanda ser el centro de atenciones, y que requiere obediencia inmediata y sumisión por parte de sus subordinados”, añade.
Agrega que los líderes autoritarios generalmente tienen firmas con una cierta profusión de ángulos, lo que deja entrever un fuerte temperamento. “Es una persona intransigente, le cuesta ser flexible a la hora de respetar las opiniones y los criterios de los demás”, sostiene.
Junto con catalogar a Trump como una persona vanidosa, Cerro destacó que posee una gran determinación y perseverancia. “No para hasta conseguir sus objetivos”, enfatiza. Además señala que es una persona moderada y reflexiva. Contrario a lo que muchos podrían pensar, indica que no es “una persona impulsiva que se lance sin control a enfrentar decisiones o proyectos”.
A pesar de estas conclusiones, Sandra Cerro aclara que la firma de Trump sólo revela sus grandes rasgos, por lo que para un análisis grafológico más profundo se debe contar con textos más amplios.
¿Escribes recto, en cursiva, muy redondo? Lo que nuestra letra dice de nosotros
Paula Cerda, Perito Calígrafo y Grafológico que es Profesora del Taller de Grafología de la Universidad del Pacífico, indicó anteriormente que un cuerpo de texto con letras que se inclinan a la derecha, indica una mirada al futuro, que puede confirmarse al momento de sellar el texto con la ubicación de la firma también en el espacio derecho. “Cada gesto, cada forma, cada elección que hacemos al escribir, da cuenta de un individuo en particular”, sostiene.
Lo mismo pasa con cada palabra y letra, que al analizarlas en detalle muestran microgestos semejantes. “Por ejemplo, la cursiva es la que nos muestra la espontaneidad y el uso de la letra script o la imprenta da cuenta de máscaras sociales y de cómo te enfrentas al mundo”, aclara la experta.
También en el estudio grafológico se analiza el uso de rectas, curvas, ángulos, puntos y círculos, y se sopesan las tendencias en su utilización. Así, por ejemplo, la experta plantea que si hay mayoría de rectas, señalan claridad, lo lógico, la capacidad de síntesis, eficiencia y concreción. Al contrario, lo curvo nos muestra cordialidad y adaptación al cambio.
Los ángulos, por su parte, pueden dar cuenta de niveles de impulsividad, de intransigencia, pero también de disciplina, perseverancia y claridad: “Muestran los límites, la intolerancia, el cambio drástico de dirección y firmeza, pero muy necesarios para la toma de decisiones”, acota.
Los puntos muestran los niveles de seguridad e inseguridad. “Son el detalle y la búsqueda de seguridad y aunque sea una mínima expresión gráfica, demuestran los niveles de atención y aplicación”, precisa.
Finalmente, los círculos son la estructura del ego. “Su uso da cuenta de creatividad, afectividad, emocionalidad y contención. Por eso que dejar círculos abiertos muestra cierta vulnerabilidad, dependiendo de la dirección de su apertura; lo mismo que remarcar el cierre de los mismos en ciertas zonas, nos dirá el grado de protección que damos a ciertos aspectos de la vida, lo que es fundamental a la hora de reforzar a nuestros niños a través de la escritura a un fortalecimiento de su estructura yoica”, concluye la profesora de Grafología de la Universidad del Pacífico.
