La incómoda interacción que tuvo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su esposa Melania durante la ceremonia de investidura realizada a fines de enero ha llamado la atención de todo el mundo, debido a lo forzada que parecía en comparación a la relación más cercana que mostraron el ex presidente Barack Obama.
Era tanta la incomodidad entre ambos, que incluso han surgido imágenes captadas durante la ceremonia que se han viralizado, como un gif en que se ve a Melania dejar de sonreír instantáneamente cuando su marido deja de mirarla. Además, todos se dieron cuenta de que Donald no esperó a su esposa cuando llegó a saludar a los Obama, y ni siquiera se molestó en voltear a ver si ella lo seguía.
— Marv (@Marv_Vien) 23 de enero de 2017
Este comportamiento de Donald Trump con Melania ha llamado tanto la atención, que fue analizado por expertas estadounidenses en lenguaje corporal, quienes explicaron qué significa la interacción entre ambos.
Susan Constantine, una experta en lenguaje corporal que ha entrenado a abogados y funcionarios gubernamentales de EEUU sobre el tema, indicó que por el comportamiento de ambos en la investidura, parecía como si ni siquiera estuviesen casados.
“Si uno no supiera de antes que están casados, no lo habríamos adivinado”, apuntó en entrevista con el portal estadounidense Mic.
En ese sentido, Constantine añadió que el lenguaje corporal de los Obama muestra que su relación es mucho más fuerte en comparación a los Trump.
“Melania es un objeto para (Trump) (…) No veo ninguna calidez en su relación”, explicó. En contraste, cuando los Obama interactúan “se entienden por medio de las miradas. Sus cuerpos se paran en paralelo. Hay mucha calidez genuina y amor entre ellos”.
Por su parte, Patti Wood, otra experta en el área, sostuvo que algunas pistas que indican que la relación entre los Trump no sería tan fuerte, es que Donald “no sólo no la esperó” cuando fueron a encontrarse con los Obamas, “sino que subió las y los saludó. Ni siquiera volteó para ver si ella seguía allí ni la ayudó a subir”.
“Cuando ella llega a su lado, él (Donald) no la abraza, no la saluda ni se acerca a ella. Sólo le da una mirada rápida, como si ella fuera cualquier persona, y nunca la toca”, acota.
En tanto, en ese mismo momento, cuando Melania le entrega un regalo a Michelle Obama y esta última se ve incómoda, pues no sabe dónde dejarlo, Barack de inmediato se le acerca y lo toma. “Es un gran momento de pareja. Es como si dijera ‘oh cariño, yo cuidaré de esto por ti"”, expresa Wood.
Finalmente, durante la noche tras la investidura, cuando fue el baile inaugural, también se pudo ver un comportamiento particular entre la nueva pareja presidencial.
Según Wood, durante el baile se pudo ver que Melania se alejaba de su esposo, en lugar de acercarse mientras bailaban. “Eso usualmente dice ‘no quiero unirme a ti como tu pareja"”. Mientras, Donald la abrazaba de una forma “sexual”, tocando su pelvis con la de él.
Los expertos recalcan que la interacción de Donald Trump con su esposa es importante de analizar, debido a la severa postura que el presidente tiene en relación a los derechos de las mujeres.
Por ejemplo, en sus primeros días en la Casa Blanca firmó una orden para que se le deje de entregar recursos estatales a organizaciones privadas que ayudan a mujeres pobres a realizarse abortos.
Esa es sólo una de las tantas medidas que anunció durante su campaña que merman los derechos reproductivos de las mujeres.
