La Corte Suprema acogió de manera parcial el recurso de nulidad presentado por la defensa de Mauricio Ortega, quien fue condenado por la brutal agresión contra su expareja, Nabila Rifo.

El máximo tribunal, en un criticado fallo, redujo en ocho años la condena contra Ortega, argumentando que el hombre no tuvo la intención de matar a su exmujer.

En conversación con Podría Ser Peor, el abogado, académico de la Universidad Diego Portales y director del equipo técnico redactor del Código Procesal Penal chileno, Cristián Riego, explicó la decisión del tribunal así como el voto disidente, del ministro Milton Juica, quien sostuvo que el objetivo de Ortega fue terminar con la vida de Riffo.

Riego destacó que más allá de la decisión que se haya determinado, “lo que se debe esperar es que los jueces resuelvan estos temas con mucha independencia”, lo que en este caso sí ocurrió.

En esa misma línea agregó que “nuestro sistema ha dado una respuesta razonable, hemos tenido un juicio transparente” y sostuvo que primó la independencia.

El especialista comentó que una de las posturas, la que finalmente se impuso en la corte, plantea que aparentemente él no buscaba matarla, porque tras dejarla inconsciente, él se va y luego vuelve pensando que estaba viva y en en vez de matarla le saca los ojos, para que viva con un sufrimiento.

Al mismo tiempo explicó que el argumento de Juica y de quienes condenador en un inicio a Ortega se basaron en que el sujeto, al golpear su cabeza con concreto, sí tenía como objetivo quitarle la vida, por lo que sí calificaba como delito de femicidio frustrado.

Además, desde esta posición, mutilar los ojos de Rifo se condenaba de manera separada y en ese contexto, se sumaba al femicidio frustrado el delito de lesiones graves gravísimas.

En esa misma línea, el abogado establece “ellos dicen que no es claro, que está la duda de si quería matarla y la duda favorece al inculpado, por lo que no se le puede condenar por homicidio”.

Revisa la entrevista realizada por Julio Cesar Rodríguez: