Desde junio de 2016 que la familia de Francisco Huaiquipán, exjugador de Colo Colo, vive un complejo escenario que podría terminar con dos de sus hijos presos, tras la muerte del joven futbolista Leopoldo Osores, en una discoteca de Maipú.
Los antecedentes, la noche de la pelea, y cómo ha enfrentado la familia el proceso, fueron parte de los temas abordados por la familia en conversación con El Mercurio.
El pasado 22 de diciembre Francisco Huaiquipán Bustos, hijo menor del exjugador, llegó a Chile tras ser extraditado desde España por su participación en el homicidio de Osores. Ese mismo día, quedó en prisión preventiva.
Pese a que Francisco y Leopoldo Osores venían del mundo del fútbol amateur, el acercamiento del fallecido deportista a la familia Huiquipán fue por una relación que mantuvo con Yaritza, la hermana mayor.
“Nos juntamos en la estación del metro Camino Agrícola y me fue a dejar a la universidad. Me contó que jugaba fútbol en el primer equipo del Juventud Norambuena, como mi hermano, pero en otra categoría”, relató Yaritza recordando su primer encuentro.
Pese a que la hija menor de Huaquipán comentó que Osores, a quien ella se refiere como “Seba” por su segundo nombre, la presentó como su “polola” en un encuentro familiar, nunca hubo una relación formal.
“Él quería que le diera más tiempo y yo no iba a dejar a mi hija y la universidad de lado. Me saturó”, explicó la joven.
Discoteca Don Óscar
El 5 de junio de 2016 Leopoldo Osores llegó con un grupo de amigos hasta la discoteca Don Óscar, en Maipú, para celebrar que en dos semanas más viajaría a probarse a un equipo de China. Esa noche también asistieron los hermanos Huaiquipán y dos amigos suyos.
Pero esta no era la primera vez que estos grupos coincidían en el recinto, ya que el 28 de mayo -una semana antes- Francisco vio a Osores besando a una mujer en la discoteca, por lo que lo encaró, aunque sin pelear. De acuerdo a Yaritza ella no se enteró de este episodio, pero terminó con el futbolista una semana después para tener mayor tiempo para ella.
Desde ese momento, Osores habría culpado a Francisco del alejamiento con su hermana.
El día de la pelea, los Huaiquipán se habían reunido en la Clínica Dávila donde se encontraba la madre de la familia, Mitzi Bustos, quien se encontraba internada por una anemia aguda. En la noche, Gerardo, el otro hermano presuntamente involucrado en el homicidio, sugirió salir a bailar.
“Yo les dije que se acostaran, que fueran conscientes de que mi mamá estaba hospitalizada, pero no me hicieron caso”, recordó Yaritza.
Hasta la discoteca, conocida por los conflictos que se generan en su interior, llegaron los hermanos y dos amigos suyos, Bryan Melián y Fabio Bravo.
De acuerdo al registro de las cámaras, el grupo de los hermanos entró al sector VIP a la 1:30 am. En su paso, se encontraron con Osores.
Gerardo Huaiquipán indicó que en esa oportunidad Leopoldo habría emplazado a Francisco: “Él encaró a mi hermano. Le dijo: ‘Por tu culpa terminé con la Yari"”.
En un segundo encuentro se puede apreciar una discusión, en la que, de acuerdo al relato de Gerardo, Sebastián (Leopoldo Osores) los habría amenazado con lanzarles una botella, además de encarar a uno de los amigos, Bryan Melián, por la responsabilidad de su familia en el encarcelamiento de parientes suyos.
Ante eso, Melián habría amenazado a Osores. “Te voy a poner los medio balazos, bastardo”, relató Gerardo al medio.
“El Bryan estaba picado. Decía que quería volver y mi hermano andaba en el auto con él. Yo, que soy más centrado, los seguí en el mío. El Bryan pasó a su casa y luego regresamos a la discoteca”, agregó.
En el estacionamiento del recinto, Leopoldo murió por un disparo en el pecho. En el lugar estaban los dos hermanos y los dos amigos.
La investigación y la versión de la familia Huaiquipán
Esa mañana Bryan se quedó a dormir en casa de los Huaiquipán. “El Pancho mató al Seba”, era el mensaje que se compartía por la gente de la población, donde jugaban ambos involucrados en el club Juventud Norambuena.
Ese mensaje le llegó a Francisco Huaiquipán padre, quien se encontraba en la clínica junto a su esposa. Salió y se fue a su casa para preguntarle a Francisco si era cierto que había asesinado a Osores.
“El Bryan saltó y dijo: ‘No le pegue na’, tío, yo fui el que disparó, pero no lo quería matar. Si fueron unos balazos en los pies no más’, relató Yaritza.
El 6 de junio, tras decisión de la familia, Francisco Huaiquipán Bustos y Bryan Melián llegaron hasta la PDI para declarar.
En la ocasión, Bryan confesó ser el autor de los disparos y Francisco confirmó su versión. De esta forma, quedó detenido por homicidio. Sin embargo, esto cambió cuando cambió su declaración y aseguró que se habría inculpado luego que la familia de los dos hermanos lo presionara a entregarse a la policía a cambio de dinero.
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Así, comenzó el proceso de extradición de Francisco y se sumó una causa también en contra de Gerardo. De esta forma, pasaban a ser cuatro los involucrados, pero ahora Bryan quedaba con la cautelar de arresto domiciliario y Francisco en prisión preventiva. Fabio Bravo y Gerardo Huaiquipán fueron identificados como cómplices.
“Estuvieron en el lugar y en el momento equivocados… Bryan sabe lo que hizo”, sostiene Mitzi, quien asegura que sus hijos son inocentes.
“A nosotros nos han cuestionado mucho. Nos han discriminado y he tenido que soportar que algunas personas traten a mi marido y mis hijos como delincuentes”, agregó.
Gerardo, por su parte, idnicó que “yo era una persona que estudiaba y trabajaba, y ahora con mi hermano arriesgamos cinco o diez años de cárcel”.
La defensa de Bryan Melián no quiso ser parte del reportaje.
Francisco Huaiquipán padre, quien en un momento sí habló del caso y aseguró que “sé que son inocentes”, tras protagonizar un incidente con la prensa ha decidido marginarse de dar más entrevistas.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)
