La ministra de Educación, Adriana Delpiano, volvió a reiterar este miércoles en el Congreso que la situación financiera y académica de la Universidad Iberoamericana no da para más y que, independiente de la apelación que haga el plantel, la decisión de nombrar a un administrador de cierre para la institución ya está tomada.
La secretaria de Estado negó que sus declaraciones hayan sido apresuradas y espera que los estudiantes que inicien su proceso de reubicación lo hagan en universidades con altos índices de acreditación, de forma que se pueda garantizar la continuidad de estudios de los alumnos de la Iberoamericana.
Así lo entienden también en la Federación de Estudiantes de la Universidad Iberoamericana, donde su presidenta, Paz Gajardo, luego de reunirse con algunos parlamentarios sostuvo que la reubicación de alumnos debe ser en universidades del Estado.
La diputada Comunista, Camila Vallejo, sostuvo que pedirán al Ministerio de Educación que se inicie una mesa trabajo con los estudiantes y los rectores del Consorcio de Universidades del Estado para empezar a conversar posibles convenios de reubicación con estas instituciones, además de disponer de recursos para quienes sigan en la Iberoamericana.
A través de un comunicado la rectoría de la universidad recordó que el plantel aún cuenta con “plena autonomía institucional” y en este momento se encuentran en la etapa de descargos, etapa que debe terminar antes de hablar de otro tipo de resolución.
