Una caravana de siete camiones municipales, cargados con 20 toneladas de alimentos no perecibles, útiles de aseo y ropa de cama, viajó hasta Empedrado en donde se quemaron más de mil casas.

Según confirmó el alcalde de Empedrado, Manuel Báez, cerca del 90 por ciento de la zona rural de la comuna quedó destrozada con el paso de los llamas, por lo que solicitó ayuda para los damnificados de la catástrofe.

El llamado fue recogido por el alcalde de Ñuñoa, Andrés Zarhi, quien de inmediato dispuso de todos los esfuerzos para llevar colaboración a la zona afectada.

Así fue como durante el XXI Festival de Verano, que se desarrolló entre el 24 y 30 de enero, se recaudó agua embotellada y posteriormente, el 1 de febrero se realizó un show solidario, el cual logró reunir 20 toneladas de ayuda entre alimentos no perecibles, para mascotas, además de útiles de aseo y medicamentos.

“Las llamas ya se fueron, pero los problemas siguen para los damnificados. Nuestro compromiso es no olvidarnos de ellos. Queda mucho por delante y yo llamo a quienes puedan seguir colaborando que lo hagan”, expresó el alcalde Zarhi.

Pese al envío de la colaboración, que además incluyó una camioneta de la Corporación de Salud para brindar ayuda médica, el alcalde Andrés Zarhi confirmó que seguirá en contacto con su par de Empedrado para estar atento a cualquier ayuda que requieran.