Demolerán edificio histórico de Santiago: acusan "daño irreparable"

La Asociación de Zonas y Barrios Patrimoniales calificó como “un daño irreparable” la demolición de un edifico histórico del centro de Santiago que pertenecía a la Sociedad Proteccion Mutua de Empleados Fiscales, el que se terminó de construir en 1924.

La inmobiliaria a cargo del proceso es propiedad de Max Marambio, quien también estuvo involucrado en la gestión de la Universidad Arcis.

Se trata de tres predios fusionados y que tiene la categoría de inmueble de conservación histórica, se edificarán dos edificios superiores a 30 pisos, y cerca de 760 departamentos.

El permiso de edificación tendría que haber caducado en enero del 2011, pero a la fecha, continúa vigente. Dicho permiso fue solicitado, entre otros, por Eduardo Contreras, abogado y exembajador en Uruguay en el segundo gobierno de Michelle Bachelet. Otro de los abogados de Marambio es Juan Pablo Hermosilla, quien defendió a la mandataria en su libelo judicial con la revista Qué Pasa y que asesoró al exministro del Interior, Rodrigo Peñailillo.

Al respecto, el abogado de la Asociación de Zonas y Barrios Patrimoniales, Luis Mariano Rendón, señaló que el municipio tiene en estos momentos la facultad de detener el avance de la demolición, ya que este proceso, se ha realizado en completa irregularidad.

“La Dirección de Obras Municipales constató, el día sábado, diversas infracciones a la ordenanza de Urbanismo y Construcción que ponen en riesgo la seguridad de los trabajadores”.

Vecinos denuncian un proceso lleno de irregularidades, por lo que la concejala por Santiago, Rosario Carvajal, presentará un recurso de protección para detener la demolición.

A través de un comunicado de prensa, la Municipalidad de Santiago, informó el envío de un requerimiento a Contraloría, solicitando que se informe sobre el estado de tramitación del pronunciamiento solicitado por la fundación defendamos la ciudad.

Denuncias por seguridad

Luis Mariano Rendón, aseguró que “se está destruyendo un inmueble de conservación histórica a lo bruto, a lo salvaje. Se está demoliendo sin las medidas básicas de seguridad, poniendo en riesgo la seguridad de los trabajadores y los transeúntes”.

“Todos sabemos que cuando hay una construcción o una demolición hay que poner coberturas para que no caigan objetos sobre los transeúntes, hay que colocar letreros de advertencia para que la gente no transite por ahí, precisamente nada de eso se ha cumplido”, denunció Rendón.

Junto con eso acusó a la Municipalidad de Santiago de no querer actuar y acusó al municipio de tener las herramientas “para paralizar este crimen urbano y no quiere usarlas”.