La Intendencia Metropolitana cifró en 50 mil los asistentes a la multitudinaria marcha en contra de la violencia de género que se desarrolló por el centro de Santiago durante la tarde de este jueves.
El punto de inicio fue plaza Baquedano, que a minutos antes del comienzo de la marcha ya se encontraba a toda su capacidad con la presencia mayoritaria de mujeres, pero también de hombres y en sí, familias.
Un “miércoles negro” en palabra de las asistentes y aquello se apreció en que la mayoría vistió prendas oscuras para reflejar el luto por los casos de Lucía Pérez en Argentina, menor de 16 años que fue drogada, violada y empalada, y de Florencia Aguirre, de 10, asesinada por su padrastro en Coyhaique.
Así lo expresaron quienes participaron de la manifestación.
Una de las coordinadoras de los grupos feministas, Claudia Tassatta, no descartó realizar nuevas movilizaciones.
La Presidenta, Michelle Bachelet, a través de un video en redes sociales, expresó que se trata de un problema que se debe enfrentar como país y que no tolerará que los crímenes queden en la impunidad, concluyendo que la violencia contra mujeres y niñas debe terminar.
