Tras la denuncia de un taxista de 59 años quien aseveró recibir cuentas del TAG por un servicio que no había utilizado, Carabineros del Servicio de Encargo y Búsqueda de Vehículos (SEBV) comenzaron las diligencias investigativas en torno a este caso.

De esta manera, personal policial estableció que transitaban dos vehículos como taxi con la misma placa patente, igual número de chasis y de motor producto del “gemeleo”, es decir, robar la identidad de un móvil para dársela a otro.

Mediante diligencias investigativas se pudo determinar que el taxi impostor se encontraba en un domicilio en la comuna de San Bernardo. Tras llegar al lugar se entrevistaron con el dueño quien les informó al personal del SEBV que éste había sido comprado a través de una página de internet a principios de año.

Al revisar el automóvil se pudo determinar que tenía su número de motor y chasis adulterado, donde Carabineros detuvo a Pablo Torres de 30 años e incautó el móvil.

“Con los antecedentes obtenidos se estableció que el Nissan V16 había sido sustraído en noviembre de 2015 en San Ramón mientras estaba estacionado, para posteriormente cambiarle la placa patente, los número de chasis, motor y ponerlo a la venta por más de $13 millones a través de internet, donde fue adquirido por Torres” afirmó el teniente Óscar Valdés de la Dirección de Investigación Criminal.

Y agregó que “en este caso tenemos tres víctimas: el dueño del taxi original quien sufrió el cargo de uso del TAG, el taxista que le sustrajeron el móvil, al igual que el comprador de buena fe quien perdió el automóvil y los $13 millones cancelados por lo que es necesario que antes de adquirir un vehículo revise detalladamente los documentos el último dueño debe ser el que se lo vende”, afirmó.

El imputado quedó en libertad previa comprobación de su domicilio mientras continúan las diligencias para dar otras víctimas, con el paradero de quienes robaron y vendieron el taxi.