La oscuridad de la madrugada de este jueves fue cómplice para que delincuentes -hasta ahora no identificados- robaran la caja de fondos de la Casa de Remates “Patricia Ramírez”, ubicada en la calle 13 Oriente entre 3 y 4 sur, adyacente al terminal de buses de Talca.

El hecho quedó al descubierto a las 08:00 horas de ayer jueves, cuando los encargados del establecimiento comercial se percataron que la puerta del local estaba abierta. Los dos candados que aseguraban el acceso principal fueron cortados, permitiendo el ingreso de los delincuentes.

En concreto, un televisor y otros electrodomésticos menores fueron sustraídos, pero al llegar a la oficina principal y toparse de frente con la caja de fondos, los antisociales trataron de abrirla. Al no poder hacerlo, decidieron llevársela completa, con todo lo que tenía en su interior.

En el lugar se constituyó primero personal de Carabineros, pero luego la Fiscalía entregó el caso a la Brigada Investigadora de Robos (BIRO) de la PDI de Talca.

Según explicó el inspector de la BIRO, Simón Garrido, el Ministerio Público ordenó que se presentaran en el establecimiento comercial junto a una patrulla de peritos del Laboratorio de Criminalística (Lacrim) regional.

“Hasta ahora se maneja la hipótesis de que serían dos o tres hombres los que realizaron el robo y lo cargaron en un vehículo. Como el local no tiene cámaras de seguridad, estamos haciendo el empadronamiento de las evidencias de las cámaras de comercios adyacentes para su análisis”, explicó.

Los peritos también realizaron la fijación del sitio del suceso y recolección de huellas que permitan develar la identidad de los delincuentes implicados en este robo millonario. Además procedieron a entrevistar a vecinos de local en búsqueda de antecedentes.

Segundo robo

Según detalló el encargado del establecimiento comercial a las autoridades, visiblemente afectado, al interior de la caja de fondos se guardaban documentos bancarios y comerciales, así como un millón de pesos en dinero en efectivo.

Añadió que se trata de la segunda vez que sufren un robo. Recordó que el 2017 delincuentes también ingresaron al local y se llevaron una cantidad considerable de electrodomésticos. “Esa vez no había dinero en efectivo”, advirtió.

Roberto Méndez, vecino del sector, aseguró que pese a estar cerca de lugares concurridos como el terminal de buses, es escasa la presencia de Carabineros. Por ello, solicitó mayor vigilancia policial en el barrio.

“Yo vivo cerca y no escuché nada, ni autos ni nada. Estamos sorprendidos, porque se llevaron la caja fuerte. Tememos que en algún momento puedan ser capaces los delincuentes de meterse a las casas a robar”, admitió.