En veredicto unánime, las tres juezas que integraron la Primera Sala del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Talca decidieron ayer absolver a un profesor, quien fue llevado a juicio por la Fiscalía y la parte querellante como presunto responsable de tres delitos de abuso sexual.

Las supuestas víctimas cursaban cuarto año básico en un colegio donde el imputado impartió clases de inglés durante 2016, ocasión en la que se habrían registrado los hechos, por lo que los apoderados realizaron denuncias a la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales de la PDI de Talca.

Con estos antecedentes, el Ministerio Público formalizó la investigación contra el docente, presentó acusación, exigiendo 10 años de cárcel por dos delitos consumados y un tercero en grado de tentado, todos reiterados. La parte querellante sumó una demanda de 50 millones de pesos como indemnización por daño moral, indicó Diario El Centro.

El jueves de la semana pasada comenzó el juicio oral, lo que derivó en que el acusado sea absuelto. El dictamen estableció que “los hechos descritos -en opinión de estas juezas- no permiten configurar el delito de abuso sexual, por cuanto las acciones desplegadas por el acusado no pueden ser consideradas como de índole sexual, pues carecen de la significación requerida, toda vez que por sí mismos no constituyen inequívocamente una expresión abusiva”.

El veredicto añade que tampoco se probaron otras circunstancias contenidas en la acusación -como que supuestamente habrían ocurrido frente a todos los estudiantes en horario de clases- y a la vez, deja constancia que las salas siempre estaban con las puertas abiertas, con visión desde un pasillo y desde otras salas aledañas.

Reacciones

Una vez conocida la sentencia, el fiscal de Curicó, Andrés Gaete, quien investigó los hechos y llevó adelante el juicio, sostuvo que “vamos a estudiar los antecedentes y decidir si se va a hacer o no uso de los recursos procesales. El tribunal da por establecido algunos hechos, pero no les otorga connotación”.

Por su parte, el abogado querellante, Ulises Gómez, comentó que “me quedo tranquilo de que, por lo menos, hay un reconocimiento de que parte importante de los hechos habrían ocurrido. Sin embargo, lo que se va a discutir es el carácter que tendrían y la convicción del tribunal. Eso es lo que tenemos que analizar para ver los pasos a seguir”.

Mauricio González, defensor particular, explicó que “el tribunal no dio por acreditado ninguno de los hechos contenidos en la acusación. Sólo se dio por acreditado que, en alguna ocasión, el profesor habría tomado por la espalda y la cintura a una de las niñas; y a otra le habría tocado una pierna”.

“Esos hechos no tienen absolutamente ninguna connotación sexual. Mi representado estuvo un año con medidas cautelares, primero en la cárcel y luego, con arresto en su domicilio. Después tuvo un trabajo que le duró dos días, como consecuencia de este mismo caso y a la fecha, se encuentra cesante”, añadió.